Del burnout al insomnio: ¿Qué trastornos mentales serán enfermedades laborales?

Entre las 10 enfermedades más discapacitantes en México están los trastornos mentales, según el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP). Las estadísticas de la Secretaría de Salud (SSa) señalan la gravedad del problema, pues en lo que va del año, al menos 946 personas han intentado quitarse la vida.

En todo 2022, la SSa registró 27,875 casos de depresión diagnosticada. Pero hasta el 10 de abril de este año, ya iban 34,205 casos, de acuerdo con el Sistema Nacional de Vigilancia Epidemiológica. Es decir, todavía no llegamos a mitad de año y el incremento respecto al año anterior ya es de 23 por ciento.

La Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) no dejó pasar esta realidad e incluyó cuatro condiciones mentales en la nueva tabla de enfermedades laborales, como parte de la reforma a los artículos 513, 514 y 515 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) que fue aprobada la semana pasada en la Cámara de Diputados.

El proceso para que este nuevo listado se vuelva realidad y las personas trabajadoras puedan acceder a una incapacidad por padecer alguno de estos trastornos debido a las actividades laborales que desempeñan todavía tiene pendiente la discusión del proyecto en el Senado de la República y, en caso de ser aprobado, su promulgación en el Diario Oficial de la Federación (DOF).

En tanto, vayamos conociendo cuáles son esas condiciones mentales, qué tipo de empleos los pueden provocar. El listado fue producto de una investigación de más de tres años, la cual fue coordinada por Cointa Lagunes Cruz, directora de Normalización de Seguridad y Salud Laborales de la STPS.

La iniciativa de reforma a la LFT que presentó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador contempla más de 190 enfermedades contenidas en 12 grupos.

El grupo IV es el de “Trastornos mentales”, dentro de él fueron contempladas cuatro condiciones. La iniciativa indica que las pueden desarrollar quienes trabajan el sector salud, educativo, transporte, atención a usuarios, seguridad pública y privada, fuerzas armadas, atención de desastres y urgencias.

El buceo industrial, el comercio y los sectores industrial, bancario y financiero son otras actividades laborales mencionadas como proclives a causar esos padecimientos.

Pero cualquier otra persona trabajadora expuesta “de forma directa e indudable a agentes causales” está en riesgo de generar estas condiciones. Puede presentarse en cualquier puesto y “su gravedad dependerá de los factores de riesgo psicosocial laborales”, agrega el documento.

Éstos son los cuatro trastornos mentales contemplados en la nueva tabla de enfermedades laborales:

» 1. Trastorno de ansiedad

Los cuadros psicopatológicos que presentan las personas que viven con ansiedad son diversos: intranquilidad, desesperación, temor y preocupaciones excesivas, o una combinación de todos estos estados, según la Guía clínica para el manejo de la ansiedad del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente.

» 2. Trastornos no orgánicos del sueño-vigilia

Dormir poco o no hacerlo perjudica el desempeño laboral, pero lo más importante: puede reducir la expectativa de vida, de acuerdo con investigaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

» 3. Trastornos asociados al estrés

Nuestro país ocupa los primeros lugares de estrés laboral o burnout en el mundo, pues el 75% de las personas trabajadoras presentan este tipo de desgaste, según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

En 2022, entró en vigor la nueva Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11) de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la que se incluye al burnout, por lo que todos los países deben considerarlo como un riesgo laboral.

» 4. Trastorno depresivo

Tan sólo en la semana previa a la aprobación de esta nueva tabla de enfermedades —del 3 al 10 de abril—, la SSa diagnosticó a 2,649 personas con depresión. En esa misma semana epidemiológica, pero de 2022 el sistema de salud detectó que al menos 2,398 personas vivían con esta condición.

“Estudios en el país han documentado la prevalencia de trastornos mentales que padece la población: entre 2001 y 2022, 9.2% de la población tuvo un trastorno depresivo en la vida y 4.8% en los 12 meses previos, según la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica (ENEP)”, señala el INSP.