Futbol y explotación laboral, las lecciones de Qatar 2022 para el Mundial de 2026

No es fortuito el nivel de siniestralidad laboral de Qatar 2022, donde entre 400 y 500 personas trabajadoras migrantes murieron laborando en los preparativos del torneo. Esquemas de contratación que se aprovechan de la fuerza de trabajo migrante, violaciones a los derechos humanos y un sistema de denuncia e inspección débil les dejaron en la mayor vulnerabilidad.

No es pronto para comenzar a hacer algo y evitar que en la Copa Mundial de Futbol 2026 ocurra lo mismo, señalan diversas organizaciones. Sobre todo, porque las condiciones laborales que se viven al menos en México y Estados Unidos no distan demasiado del mercado laboral de ese país árabe, advierten.  

La competencia se llevará a cabo dentro de cuatro años en ciudades de Canadá, Estados Unidos y México, será la más grande en la historia de la FIFA y la primera con un código de derechos humanos que se debe cumplir. Aunque parece que falta mucho, se atraviesan procesos electorales y cambios de administraciones que podrían obstaculizar o revertir los avances.

Dos sectores que serán “punta de lanza en la generación de empleo, antes y durante el mundial” en México son la construcción y la prestación de servicios en hotelería, restaurantes, aeropuertos y transporte, dice Hugo Mendoza, director del Centro de Reflexión y Acción Laboral (Cereal).

Al mismo tiempo serán “los más vulnerables para los trabajadores, por los contratos temporales y ante el desconocimiento de sus derechos”, agrega. En México, de las más de 1.5 millones de personas trabajadoras de apoyo en la construcción, 1.4 millones labora en la informalidad, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE). 

Las muertes de trabajadores y trabajadoras en Qatar son también una señal de alerta para la siguiente Copa, dice Evy Peña, directora de Campañas del Centro de Derechos del Migrante (CDM). “Norteamérica y Qatar no son lo mismo, pero los paralelos son innegables: tenemos un esquema de migración laboral igual, una preocupante violencia de género, restricciones para la prensa y discriminación contra la población LGBTIQ+”.

El tema laboral es crítico para prevenir que se repita la historia en esta parte del mundo, el cual se debe abordar de manera trasnacional y “con un foco central en la democracia y libertad sindical”, señala.

Sin embargo, “el contexto en México es único y muy diferente al que se vive en Estados Unidos y Canadá, por eso pedimos que en la planeación de este evento, empezando desde ya, se tome en cuenta la particularidad de nuestro país”.

Esquemas laborales casi iguales

Hassan Al Thawadi, secretario general del Comité Supremo de la Organización y el Legado de Qatar 2022, admitió que “entre 400 y 500 trabajadores migrantes” fallecieron en diversos proyectos del mundial. Más tarde, el organismo intentó matizar la información y en un comunicado aseguró que en las obras a su cargo sólo murieron 40 trabajadores.

Los esquemas de contratación de migrantes que utilizaron en aquel país son casi idénticos a dos de los que operan en Estados Unidos. Evy Peña, quien junto con sus compañeras del CDM, ha denunciado las malas prácticas de los programas estadounidenses H-2A y H-2B, explica:

“Las visas de trabajo temporales están atadas a un empleador y no pueden cambiarse de empleo, muchas veces ellos les retienen sus documentos, tienen prestaciones muy limitadas ante la ley y hay un gran desbalance de poder entre la persona trabajadora y el empleador”.

Personas migrantes pagaron millones de dólares por cuotas de reclutamiento para laborar en Qatar y cientos de ellas murieron en el desarrollo de la infraestructura. “Ahora, sus familias en sus países de origen no pueden acceder al mecanismo de reclamación de la FIFA porque es inoperante”.

En México ya pasa eso con las personas que quieren aprovechar el programa de visas temporales H-2A para trabajos agrícolas en Estados Unidos, o para empleos no calificados con la visa H-2B. Pagan miles de pesos a reclutadores por ofertas que a veces resultan ser falsas.

Pero México es no sólo es un país de origen migratorio, también es de tránsito y destino. “Tenemos que asegurarnos de contar con las protecciones para personas migrantes”, destaca la especialista en migración.

Para el Mundial de 2026, hay que tener en cuenta que se llevará a cabo en tres países. “Es una gran oportunidad para asegurarnos que los mecanismos funcionen, tomando en cuenta las condiciones de movilidad laboral”, dice Evy Peña.

Mujeres, acceso al agua y turismo

Hay otros aspectos igual de importantes, o más bien, transversales a migración laboral. En la Ciudad de México, una de las sedes de la Copa del Mundo 2026, la Red de Mujeres Sindicalistas (RMS) encontró tres problemáticas de género.

Una de ellas es la prevaleciente discriminación y violencia laboral, otra son las medidas de seguridad e higiene en la construcción alrededor del Estadio Azteca que no están tomando en cuenta a las mujeres trabajadoras y la falta de cumplimiento de normas laborales, según explica Rosario Ortíz, coordinadora colegiada de la RMS.

“Los trabajos previos y durante el evento requieren ser monitoreados e inspeccionados por la autoridad”, dice Hugo Mendoza, director de Cereal. No se puede dar por hecho que la FIFA y las empresas cumplirán los estándares de protección a derechos humanos, cuando en México hemos tenido un gran rezago en la implementación de éstos, explica.

En Monterrey, Nuevo León, otra de las sedes, el desabasto de agua para una parte de la población ha sido un grave problema y lo podría ser “en la integración de la fuerza laboral migrante”, advierte Evy Peña.

En esa ciudad, en la capital del país y en Guadalajara, Jalisco, la tercera sede en México, existe la infraestructura básica para los partidos. Sin embargo, se harán adecuaciones y ampliaciones. En algunos casos se construirán hoteles y se requerirá de personal que los opere.

Pero también en la economía que detonan las justas deportivas hay otras actividades. Por ejemplo, la producción de los uniformes, souvenirs, ropa, comida y materia primas, para todo ello, dice la directora de Campañas del CDM. “Y mucho de ello pasará también en otras ciudades que recibirán a turistas”.

Será el mundial más grande “y tenemos que asegurarnos que estemos mitigando todas las violaciones de derechos humanos laborales preexistentes y que puedan surgir por el evento, y que al terminar se sigan cumpliendo”.