Oferta de trabajo: ¿Cuándo es bueno (y necesario) decir “no”?

Las expectativas que se tienen de un puesto de trabajo en algunas ocasiones no se cumplen cuando ya estás dentro de la organización, y pueden existir varias razones para esta situación; sin embargo, también hay red flags que tal vez no viste durante el proceso de selección que, de analizarlas, te hubieran hecho pensar dos veces si aceptar el puesto era lo correcto.

Cuando el reclutador “te está conquistando”, mostrará lo mejor de la empresa para que te enamores de ella y le digas que sí, pero debes estar muy atento a ciertas alertas que pueden ser una muestra de la cultura organizacional.

Jessica Cambray, asesora laboral, explica que la selección de personal es un proceso crucial en la gestión de una empresa, pero no se trata sólo de encontrar al candidato adecuado para el puesto, sino también de garantizar una experiencia positiva para los entrevistados como para los empleados actuales.

“Desafortunadamente, no todas las empresas realizan un proceso de selección justo y respetuoso, lo que puede resultar en alertas o red flags para los candidatos”, asegura la experta.

El proceso de reclutamiento se ha convertido en un clave para las organizaciones; sin embargo, hace cinco años, ocupar un puesto tomaba casi 15 días, pero el tiempo promedio en la actualidad es de 23 días hábiles, según la revista The Quarterly Journal of Economics.

6 red flags en un proceso de selección

Estas son algunas de las cosas que deben sonar en tu cabeza como sirena de ambulancia y que te están indicando “peligro no aceptar”:

» 1. Sueldo competitivo  

Algunas veces ni en el anuncio, ni durante el proceso de selección se establece cuál es el sueldo que se tiene contemplado para esa plaza, al contrario, salen frases como “¿cuánto quieres ganar?”. 

El salario es fundamental para cualquier trabajador, razón por la que evasivas como “es un sueldo competitivo”, “está sobre la media”, “según aptitudes”, seguramente es algo que debes considerar, refiere OCC.

» 2. Entrevistador grosero

Jessica Cambray indica que una de las principales “red flags” es cuando el entrevistador es grosero, ya que la entrevista debería ser una oportunidad para conocer a los candidatos y hacerles sentir cómodos.

Si el entrevistador tiene esa actitud, habla un poco o mucho de cómo será la cultura laboral dentro de la empresa.

» 3. Falta de interés

No hay nada peor que sentir el desinterés de las personas. En un proceso de selección este tipo de actitudes denotan que, tal vez, sólo se está realizando el protocolo, pero en realidad ya se tiene a un candidato en la mira.

También, dice Jessica Cambray, esto podría indicar que la empresa no valora a sus empleados y solo busca contratar para llenar un espacio vacío.

» 4. Lucrar con la desesperación  

La especialista afirma que es importante que los candidatos estén atentos a cualquier señal de que están explotando su desesperación. 

Si la empresa parece estar presionando al candidato para que acepte el trabajo o para que renuncie a otros trabajos en el proceso de selección, esto podría indicar que no tiene en cuenta las necesidades de la persona y sólo busca llenar una vacante.

» 5. Respuestas a inquietudes  

Por otra parte, OCC refiere que es necesario que recuerdes hacer preguntas, y no sólo te fijes en la respuesta si no en la forma en que responde el reclutador.

La forma de responder es clave, ¿se muestra esquivo o sus respuestas son vagas? Pon atención a eso y, sobre todo a lo que te dice: Si la rotación es alta, las oportunidades de crecimiento, el ambiente laboral.  

» 6. Proceso respetuoso

Para Jessica Cambray, el proceso de selección debe ser justo, respetuoso y transparente para garantizar una experiencia positiva para los candidatos. “En última instancia, los candidatos merecen ser tratados con respeto y consideración, y es hora de que las empresas vuelvan a la humanidad en el proceso de contratación”, refiere.

El proceso de selección es el reflejo de lo que te puede esperar si la empresa te contrata, finaliza la especialista.