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AMLO y Biden, mensajes cruzados
Los presidentes de México y Estados Unidos se enviaron ayer 16 de septiembre, sendos mensajes cruzados.
El primero lo hizo de manera indirecta a través de una pieza discursiva. El segundo lo hizo a través de una misiva.
Ambos ocurrieron en torno al festejo por el 211 aniversario de la independencia de México.
Aquí en México, en el marco del desfile militar, el presidente Andrés Manuel López Obrador pidió al presidente de Estados Unidos, Joe Biden que retire el bloqueo económico contra Cuba.
Ante el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel -quien asistió como invitado especial a los festejos- el presidente mexicano se pronunció porque su homólogo estadounidense “ponga fin a la política de agravios hacia Cuba”.Desde el punto de vista del Jefe del Ejecutivo mexicano ningún Estado tiene derecho a someter a otro para obligar a sus ciudadanos a enfrentar a su propio gobierno.
Apenas una hora antes, se publicó una carta -seguramente la conoció y leyó el presidente López Obrador, antes de su discurso público- en la que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden felicita a México y a los mexicanos por el aniversario de la independencia nacional.
El presidente estadunidense, en su breve carta, remarcó que México es uno de los socios más apreciados de EU y expresó su deseo de que ambas naciones continúen reforzando el comercio y la inversión a través del T-MEC, entre otros temas. Lo más probable es que el presidente Biden se enteró más tarde del discurso presidencial mexicano.
Fueron dos mensajes cruzados en tiempo y forma.
El del presidente estadunidense, formal y protocolario, deja ver el interés de EU respecto de México por los intereses mutuos y los avances logrados en el contexto del T-MEC, el fenómeno migratorio y las crisis sanitaria y económica derivadas del Covid-19.
En tanto que el mensaje del presidente mexicano, no solo por el tema sino por la forma en que lo abordó, descubre abiertamente la posición de su gobierno respecto del gobierno de Cuba hoy encabezado por Díaz-Canel.
Calificó al bloqueo de “perversa estrategia” que, “en caso de tener éxito, se convertiría en un triunfo pírrico, vil y canallesco, en una mancha de que esas que no se borran ni con toda el agua de los océanos”.
Y expresó su esperanza porque el presidente Biden, “quien posee suficiente sensibilidad política, actúe con esa grandeza y ponga fin, para siempre, a la política de agravios hacia Cuba”.
Para Cuba y su revolución, el presidente de México, sólo tuvo palabras de reconocimiento.
Expresó que haber resistido 62 años sin sometimiento es una indiscutible hazaña histórica.
Consideró que “por su lucha en defensa de la soberanía de su país, el pueblo de Cuba merece el premio de la dignidad y esa isla debe ser considerada como la nueva Numancia por su ejemplo de resistencia; y, por esa misma razón debiera ser declarada patrimonio de la humanidad”.
Son muchos los mensajes de forma y fondo emitidos por el presidente de México y muchos los elementos a considerar en el contexto del embargo.
1.- La invitación del presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, quien ha sido duramente criticado por su reacción represora reciente frente a grupos de cubanos críticos.
2.- La petición del retiro económico a Cuba, en sí misma no es tan relevante si se considera que a lo largo de la historia ha sido condenado casi una treintena de ocasiones por la mayoría de países, en Naciones Unidas.
3.- Los presidentes de EU han tenido distintos matices en el embargo a Cuba. Recientemente Barack Obama -con la supervisión de Biden como vicepresidente- lo suavizó y posteriormente Donald Trump lo endureció.
5.-Biden, frente a las recientes protestas en Cuba y la represión consecuente, aunque ha prometido una nueva política hacia Cuba, ha mantenido hasta ahora las restricciones en viajes y remesas a la isla impuestas por su antecesor Donald Trump.
Habrá que ver si para México fue el mejor momento y la mejor manera de pedir el cese del embargo.
Ocurre justo cuando en el Parlamento Europeo se está condenado la falta de avances en materia de derechos humanos y libertades fundamentales, así como en las condiciones económicas y sociales de los ciudadanos cubanos.
Veremos la reacción hacia México de nuestro principal socio comercial.