Policrisis mundial

Hay una policrisis expresada en el calentamiento global, las pandemias, la desigualdad extrema en los ingresos, la erosión democrática y los conflictos armados. No hay soluciones globales, solo acciones parciales. Las instituciones internacionales que fueron creadas para enfrentar los problemas globales han demostrado vulnerabilidades. 

Se necesita aplicar medidas alrededor de una política económica adaptativa, que resuelva el equilibrio social y económico. Esto se hace cada vez más difícil porque muchos gobiernos han cedido la decisión de que los mercados sin regulaciones proporcionen el capital, los bienes y los empleos.

Con Trump se consolidará el capitalismo salvaje. Un dato: de 4.1 billones de dólares es el valor total de las 10 empresas más valiosas del mundo, todas estadounidenses, donde predominan las firmas tecnológicas. Representan el 20% del PIB nacional de EU. De ahí, los desplantes de Trump y de Elon Musk el hombre más rico del mundo. Este último dice que pueden hacer los golpes de Estado que quieran. Estas posiciones y las medidas que apliquen crearán una ola de descontentos, protestas y teorías conspirativas. Lamentablemente, el Partido Demócrata solo atiende a una élite reducida.

Una opción salvadora en el escenario mundial es la que ofrece el Partido Laborista y el primer ministro de Inglaterra que han planteado como prioridad económica mejorías en la distribución del ingreso y una economía verde capaz de crear nuevos empleos, industrias y tecnologías.

Otra opción es la que ofrece la economía mixta que ha sido menospreciada. En la batalla ideológica ganó la tesis neoliberal que estigmatizaba al Estado como pésimo conductor de la economía. Pero ahora el neoliberalismo también está en crisis, lo que explica el ascenso del populismo. Evitando las distorsiones que se pueden crear en la economía mixta es una forma de realizar la política de desarrollo económico y social.

También es importante observar la interpretación socialdemócrata que se creó en los países nórdicos. Descansa en una redistribución del ingreso a través del gasto público canalizado a servicios gratuitos en educación, salud, seguridad social. La base de ello son altos impuestos. Estos países tienen comparativamente con el resto del mundo las menores brechas de ingresos entre los niveles altos y bajos.La fórmula de conflicto y también de equilibrio es el Estado-mercado. El Estado como regulador, árbitro de intereses sociales y compensador de los desequilibrios. El Estado de derecho y gobierno de leyes, régimen democrático. El mercado como el espacio para el ejercicio de la libertad individual y también para procurar la prosperidad. Mercado activo de privados, cultura plural y abierta, seguridad e igualdad de oportunidades.

Giorgio Napolitano, antes de retirarse de la Presidencia de Italia, dejó la siguiente reflexión: “La razón política y el sentido de Estado son las mejores herramientas para superar situaciones aparentemente irresolubles”.