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El arte mexicano en el mundo
La madurez del mercado del arte mexicano requiere un mayor enfoque hacia los nuevos artistas. Obras de artistas mexicanos se encuentran en las colecciones del MoMA y la Tate Modern de Londres. Son piezas de Abraham Cruzvillegas, Damián Ortega o Gabriel Orozco.
Donde se vende más y mejor el arte mexicano no es en México. Los grandes compradores se encuentran en el extranjero y, más específicamente, en Nueva York.
En México, según el informe de El Economista sobre el mercado del arte 2012, se movilizaron 20 millones de pesos en el sector formal. En casas de subastas, el mercado local sólo representó 6.5 millones de dólares, frente a los 27.9 millones que sumaron las ventas de arte mexicano en las subastas de Nueva York.
La percepción del arte mexicano en el extranjero ha cambiado de forma favorable. Patricia Sloane, curadora, explica a El Economista:
Anteriormente los artistas latinoamericanos (lo que incluye a los mexicanos) estaban clasificados bajo la etiqueta de 'arte latinoamericano'. Hace ocho años cruzaron la frontera hacia la categoría de 'arte contemporáneo'. Esto es un gran paso para los artistas, pues cruzan una línea en la cual la principal diferencia son más ceros en el precio de sus obras .
Para tener una idea clara de cómo está parado el arte proveniente de América Latina basta reunir los 61 cuadros latinoamericanos vendidos a precio más alto en subastas en Nueva York. La suma es de 122,231,947 millones de dólares. La cantidad sólo alcanza para comprar un Picasso como Nude, Green Leaves and Bust , subastado por Christies.
De esas 61 piezas, 36 corresponden a artistas mexicanos consagrados: trece son de Rufino Tamayo, ocho de Frida Kahlo, seis de Diego Rivera, cinco de Alfredo Ramos Martínez, una de José María Velasco, una de Remedios Varo, una de José Clemente Orozco y una de Miguel Covarrubias.
Ellos son considerados creadores consagrados no sólo por la calidad de su obra, sino por su éxito comercial. La madurez del mercado del arte mexicano requiere un mayor enfoque hacia los nuevos artistas.
Mónica Manzutto, cofundadora de la galería Kurimanzutto, considera que México va por buen camino:
En el 2011 el Museo de Arte Modero de Nueva York (MoMA) adquirió obra de Abraham Cruzvillegas, Damián Ortega y Gabriel Orozco. Carlos Amorales y Dr. Lakra ya están presentes en la colección con adquisiciones anteriores. La Tate Modern de Londres, que lleva un programa enfocado a América Latina, tiene en su colección permanente obra de Minerva Cuevas, Cruzvillegas, Ortega, Amorales, Gabriel Kuri, Dr. Lakra y Orozco .
¿QUIÉNES SE INTERESAN POR EL ARTE?
El diletante. Este término proviene del italiano y se refiere al aficionado. Es quien por simple gusto tiene contacto frecuente con las artes visuales: asiste a exposiciones, museos, salones y conferencias. No necesariamente compra. Le basta con ver, sentir, gozar o sufrir el arte.
El coleccionista. Es quien tiene verdadera pasión por el arte y por adquirirlo. Un buen coleccionista está enterado sobre el arte que le interesa, desarrolla un sentido que le permite definir y acotar el campo de sus adquisiciones. Es selectivo, riguroso, compulsivo y cuidadoso.
El esnob. Ve al arte y su mercado como vía para destacar y posicionarse socialmente. Difícilmente siente las obras de arte.
El comprador ocasional. Puede ser una combinación de los tres tipos anteriores y, eventualmente, suele adquirir obras. No tiene clara una línea, estilo, época o escuela de su predilección.
El inversionista. Los hay de dos tipos: el conocedor, generalmente un comerciante de arte (galerista, corredor, subastador), que sabe lo que compra. También está quien quiere preservar su dinero con miras a ganar en un futuro. En muchos casos no posee mayor información, ha oído que el arte es buena inversión y sin mayores preámbulos se lanza a invertir . Usualmente en el pecado lleva la penitencia: le venden caro, muchas veces obra falsa o de mala calidad.