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Festival Cervantino arranca con feeling
Entregan preseas cervantinas a Gladiola Orozco y a descendientes de los teatreros Enrique Ruelas y Eugenio Trueba; la gente comienza a llenar las calles de Guanajuato.
Con candombe beat, son, cumbia y hasta un poco de rock, arrancó el Festival Internacional Cervantino (FIC) en una Alhóndiga de Granaditas repleta de gente, como ya es costumbre.
El uruguayo Rubén Rada prendió la fría noche con su voz, las percusiones y su música, que contagiaron al público, particularmente con una versión pop funk donde el protagonista es Robin Hood, que de inmediato provocó el baile y el público acompañó al músico con sus palmas.
Rada es un showman, un genio musical, un brujo que fusiona el jazz con su candome uruguayo en un una mezcla sabrosa, rica, que asombra cuando -claro- hace un homenaje a José Alfredo Jiménez a ritmo de tambores y su versión de Un mundo raro .
En la zona VIP del lugar estuvieron el gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez, el escritor Jorge Volpi -quien se estrena como Director del Cervantino- y otros invitados especiales; destacó la ausencia de Rafael Tovar y de Teresa, presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), en su representación llegó María Cristina García Cepeda, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes.
García Cepeda expresó el sentido social de esta edición del FIC, la cual llegará a foros poco habituales, como escuelas, cárceles y asilos.
Fuera de la inauguración oficial, los trajes de gala y los guaruras, las calles de Guanajuato ya vibran y se llenan de mimos, teatreros, trovadores, payasos y espectáculos callejeros: el verdadero espíritu de la fiesta cervantina.
Y la gente comienza a llenar las plazas las calles de Guanajuato, ciudad que espera a más de 150,000 turistas que dejarán una derrama aproximada de 400 millones de pesos en los 18 días de la fiesta cultural más importante de América Latina.
La seguridad es discreta, un detalle que sobresale de años anteriores, en los que numerosos militares se podían ver en las calles de Guanajuato.
Y esto apenas comienza.
TRES PRESEAS CERVANTINAS ?DOS MÁS QUE DE COSTUMBRE
Por la mañana, el FIC entregó preseas cervantinas a la coreógrafa Gladiola Orozco, así como a los hijos del dramaturgo Enrique Ruelas y del director de teatro universitario Eugenio Trueba.
En la ceremonia inaugural en la mañana, Jorge Volpi recordó que el encuentro que ahora dirige aspira sobre todo a ser un festival más cercano de la gente, que llegue a otros puntos y que ayude a la formación de nuevos públicos.
El FIC distinguió a la maestra Gladiola Orozco (1934), una figura reconocida por su trabajo y aporte en la danza, así como por su permanente compromiso social.
Volpi indicó que, en esta ocasión, amparado con esta misma idea que funda el FIC, se otorgan dos preseas adicionales; la primera, de manera póstuma, al maestro Enrique Ruelas (1913-1987), artífice de los entremeses cervantinos que se llevan a cabo hace 60 años y que dieron origen al Festival Internacional Cervantino.
Manifestó que la labor del maestro Ruelas no hubiese sido posible sin la colaboración y complicidad de Eugenio Trueba (1920), del Teatro Universitario en Guanajuato, quien también se hizo acreedor a la presea. Estas medallas fueron recibidas por los hijos de los personajes distinguidos.
vgutierrez@eleconomista.com.mx