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Capital Humano

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Trabajadoras del hogar recuperan nivel de empleo previo a la pandemia

Después de casi tres años, otra vez son más de 2.4 millones personas dedicadas al trabajo del hogar remunerado. Su retorno va de la mano de más mujeres ingresando al mercado laboral.

En noviembre, más de 2.4 millones de empleadas del hogar tenían trabajo. Eso significa que la fuerza laboral que cuida de las personas, limpia sus casas, prepara sus alimentos y tiene su ropa limpia para que el resto de la economía funcione recuperó su nivel de empleo previo a la pandemia de covid-19.

Los últimos resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) indican que nuevamente las mujeres están tomando más puestos en este sector. En julio de 2020, la tasa de desempleo para las trabajadoras en casas particulares llegó a 32% y superó por mucho la desocupación general.

En marzo de 2020, antes de que la pandemia afectara el mercado laboral, había poco más 2 millones 390,000 personas en el trabajo del hogar. Para julio de ese año, sólo 1.6 millones conservó su puesto. Miles fueron despedidas sin liquidación, según documentó el Sindicato Nacional de Trabajadores y Trabajadoras del Hogar (Sinactraho).

Casi tres años después, la ENOE vuelve a reportar más de 2.4 millones de puestos de trabajo ocupados en este sector. En este periodo las trabajadoras del hogar en México conquistaron derechos que les habían sido negados, como la seguridad social obligatoria. No obstante, menos del 2% de ellas está inscrita en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

A nivel global, sólo 6% en este sector tiene acceso a la protección social completa, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Ellas siguen a cargo, eso no cambia  

De las más de 2.1 millones de personas ocupadas en esa actividad en noviembre 2021, casi 200,000 eran hombres y más de 1.9 millones, mujeres. Pero en noviembre de este año hay menos trabajadores activos (174,000), y más mujeres contratadas (más 2.2 millones).

Es decir, la tendencia observada al inicio de la pandemia, cuando en los hogares despidieron a las mujeres y contrataron más hombres, se ha revertido.

Volvamos a julio de 2020: casi 720,000 empleadas del hogar se quedaron sin trabajo. Sin embargo, la tasa de empleo anual para los hombres en estas actividades creció 7 por ciento.  

El confinamiento para detener los contagios dejó en el desempleo a millones de personas, principalmente a quienes ya padecían la violación a sus derechos humanos laborales, como las mujeres. Pero particularmente, las mujeres trabajadoras del hogar.

Los datos de la ENOE dan cuenta de lo anterior. En julio de 2020, el 15% de las mujeres que tenía trabajo un año antes quedó desocupada de su actividad remunerada. En la misma situación estuvo el 10% de los hombres.

En un contexto en el que el país se encuentra en su nivel de desempleo más bajo desde hace 15 años, con una tasa de 2.8%, en el comparativo anual hay 905,000 hombres ocupados más que en noviembre de 2021 y 1.5 millones de mujeres más que en el mismo periodo de comparación.

A medida que más mujeres han vuelto a laborar en diferentes sectores, las empleadas del hogar han regresado a las casas de esas otras trabajadoras para encargarse de las tareas domésticas. Los roles de género y la división sexual del trabajo siguen de pie.

En 2021, el valor económico del trabajo del hogar y de cuidados no remunerado fue de más de 6.8 billones de pesos, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Mientras que las mujeres aportaron el 73% y los hombres, el 27 por ciento de esa cifra.  

En el trabajo del hogar pagado, los hombres son contratados principalmente como choferes y en segundo lugar, como vigilantes o porteros. También hay una diferencia en las perpecepciones económicas, pues el 47% de las mujeres ganan un salario mínimo y sólo al 27% de los hombres les pagan esa mínima cantidad.  

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