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México, a ciegas en el desarrollo de Internet
México navega a ciegas con la Estrategia Digital Nacional, el plan maestro para detonar el desarrollo del país a través de las tecnologías de la información.
Entre las celebraciones por el Día del Internet, México navega a ciegas con la Estrategia Digital Nacional, el plan maestro para detonar el desarrollo del país a través de las tecnologías de la información.
La Estrategia Digital Nacional, a cargo de Alejandra Lagunes y anunciada en noviembre del 2013, busca abarcar cinco frentes: transformación gubernamental, economía digital, salud, seguridad ciudadana y educación, pero expertos consideran que la falta de indicadores y metas claras así como de presupuestos asignados exclusivamente para este programa hacen de la EDN un manifiesto de buenos deseos.
"Mientras siga siendo una política a ciegas, esencialmente estamos esperando buena suerte y esperando que nuestra intuición no sea errónea. Me sorprendería que fueran grandes ideas y eso es por lo que se debe presionar para que digan cuál es el costo y el beneficio", dijo en una entrevista Bjorn Lomborg el director del Copenhagen Consensus Center (CCC), un think tank de políticas públicas.
"La oportunidad es ver si una de las cosas que proponen es fenomenal y el resto no tienen sentido, para enfocar los recursos, el dinero y la energía en eso. Hay una gran diferencia entre lo que pensamos que está bien y la realidad, y es por eso que necesitamos esos números", agregó.
Cuando Lagunes presentó la Estrategia Digital, dijo que la meta es que en 60 meses (o para el 30 de noviembre del 2018, cuando termine el periodo del actual gobierno), México tenga el primer lugar en conectividad en América Latina, desde el quinto que ostenta, y escalar posiciones en los indicadores de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Pero los expertos son escépticos.
"La diferencia entre una meta y un sueño es la fecha límite para lograrlo. Para que la estrategia Digital en México sea un éxito, se debe tener en cuenta primeramente metas medibles y tangibles con fecha límite, y después un plan de acción concreto para lograr las metas en el periodo de tiempo que se marque, es decir, comprometer recursos y proyectos para alcanzar las metas", aseguró Alexia González Fanfalone, experta en telecomunicaciones y banda ancha, y Maestra por parte de la Escuela de Economía de Toulouse.
La experta aseguró que cualquier proyecto de infraestructura del calibre requerido para una estrategia de digitalización, como el despliegue de banda ancha y conectividad, excede el plazo de un sexenio ya que estamos hablando de inversión en infraestructura a largo plazo donde, de resultar efectivos, los beneficios se verán en 10 ó 15 años.
Y la ciudadanía también es escéptica. El colectivo ciudadano ContingenteMX considera que ni la Estrategia Digital Nacional, ni programas como México Conectado han permitido a México escalar lugares de acceso a internet y de calidad en el servicio a nivel regional y mundial.
"Dicha política no parte de las personas como sujetos de derechos fundamentales y no establece metas claras, ni responsables específicos. Llega al grado de no comprometerse con un calendario de metas", dijo el colectivo en un comunicado.
Las promesas de sacar del bache digital a México se enfrentan a la efectividad de las políticas públicas para afrontar el rezago.
De acuerdo con la información del monitor internacional Internet World Stats, con datos al primer semestre del 2014, México tenía una penetración de internet que apenas roza al 50% respecto al total de los habitantes. Su cálculo revela que en el país existen 59.2 millones de internautas que representan al 49.2% del total de la población mexicana.
Entre los principales rezagos, González Fanfalone observa el de la banda ancha, de acuerdo a datos de la OCDE de junio del 2014, en términos de banda ancha fija, México contaba con sólo 11.6% subscriptores por cada 100 habitantes comparado con el promedio de la OCDE de 27.4%. En banda ancha móvil, los datos del 2013 de la Unión Internacional de Telecomunicaciones indicaban que México tenía una penetración de 11.75% versus un promedio de 75% de los países industrializados.
"Parecer ser que México (IFT) corrigió su cifra del 2014 dado a un cambio metodológico en cómo se miden los usuarios de banda ancha Móvil, y en 2014 reportó a la OCDE una penetración de 39.9%. Aun así, esta penetración está muy por debajo del promedio de la OCDE de 78%", acotó la experta.
La accesibilidad y la calidad de los servicios de conectividad son otro asunto que resolver donde en México se ha mantenido en un área gris.
"Tomemos el ejemplo de la Agenda Digital Europea: en ella se estipularon las metas de cobertura de banda ancha por velocidad, y la fecha en que se lograrían dichos objetivos. En Europa se decidió que para el año 2020 todos sus ciudadanos contarían con conexiones de Internet de 30 Mbps, y que al menos 50% de los hogares Europeos tenían conexiones de Internet mayores a 100 Mbps en 2020", dijo.
Ecosistema emprendedor incompleto
Si bien Internet ha traído una oportunidad para la generación de nuevos negocios en el país, aún dista de convertirse en la tierra prometida para el emprendimiento tecnológico.
Eric Pérez-Grovas Aréchiga, socio fundador de Jaguar Ventures y presidente de la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) asegura que el trabajo del sector financiero para bancarizar y democratizar los pagos digitales para impulsar la economía digital es uno de las dolencias para fomentar el emprendimiento.
"Un desafío importante está en el tema de la capacidad de pago digital. En México, comparado con otros países de la región, el pago por internet es más complicado. Lo que ha pasado es que tenemos una menor penetración de tarjetas de crédito como lo que tiene Brasil, e incluso con las tarjetas de crédito cuesta trabajo cobrar por internet. Si ves los porcentajes de conversión de e-commerce, los porcentajes de conversión en México son menores", comentó.
Las políticas para emprendedores son vitales para México ya que 99.8% de la empresas son pequeñas y medianas empresas y generan casi la mitad del PIB del país además de que emplean a 72% de la población, aseguró González Fanfalone.
La experta reconoce que aún se necesitan políticas públicas que busquen aumentar la alfabetización digital, así como aplicaciones que ayuden a los emprendedores a aumentar su productividad o tener acceso a fondos en línea.
"No sólo basta con desplegar la red, sino que los servicios sean asequibles para los usuarios (esto se hace a través de fomentar la competencia en el sector), y que las aplicaciones sean útiles para los ciudadanos y emprendedores", aseguró.
Ciudadanía quedó fuera
En el desarrollo de las políticas públicas y la definición del futuro de Internet en México, la ciudadanía quedo excluida, acusó el colectivo ContingenteMX.
La falta de respuesta ante propuestas emanadas de la ciudadanía como Libre Internet para Todos, o la aprobación de normas que ponen en riesgo las libertades digitales hacen que el colectivo sentencie: "en México, no hay nada que celebrar".
"A pesar de ello la actual legislatura del Congreso de la Unión que está por concluir, no ha dictaminado y previsiblemente no dictaminará la primera iniciativa ciudadana a nivel federal entregada por nuestras organizaciones el 22 de febrero de 2013 que proponía una reforma constitucional y una legislación secundaria para garantizar Libre Internet para Todos", señaló el colectivo defensor de los derechos digitales.
ContingenteMX insistió en que con la aprobación de la reforma a la Ley Federal de Telecomunicaciones, los peligros para la libertad en internet se incrementaron al otorgar a un conjunto amplísimo de autoridades, la posibilidad no solo de intervenir las comunicaciones privadas, sino de reunir información personal sensible sobre las personas, sin autorización, ni supervisión judicial.
"A la par de darse autoridades para actuar sin rendir cuentas, el gobierno echó a andar un proceso acelerado, el mayor de todos los gobiernos en la historia de México, de reserva de información por motivos de seguridad nacional que le permiten actuar en la opacidad total, un sistema de vigilancia de las telecomunicaciones de presupuestos multimillonarios", acusó.
La visión del colectivo ciudadano difiere así a los discursos oficiales y corporativos sobre el avance de Internet en México.
La ciudadanía ve un endurecimiento de leyes de control, censura en medios sociales, bloqueo de un nombre de dominio, ataques a portales independientes, hasta "estrategias sofisticadas de violencia a periodistas" empoderadas, en gran medida, por la intervención de las comunicaciones y vigilancia de Internet.
julio.sanchez@eleconomista.mx
erp