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Avanzan las conversaciones comerciales entre la UE y el Mercosur
Las conversaciones comerciales entre la Unión Europea y el Mercosur entran en una fase intensiva en Brasil. Los negociadores buscan conciliar diferencias y avanzar en un acuerdo que ha estado en suspenso desde 2019, con especial atención a las preocupaciones ambientales.
El Presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, es recibido por la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en el día de la cumbre entre los líderes de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), en Bruselas, Bélgica, el 17 de julio de 2023. Foto: Reuters
Los negociadores de la Unión Europea y el Mercosur se reunieron en Brasil el martes y el miércoles para tratar de conciliar sus diferentes posturas y completar un acuerdo comercial que lleva dos décadas en preparación, dijeron a Reuters tres fuentes diplomáticas.
Los cuatro países del bloque comercial sudamericano habían preparado su respuesta a la adenda de la UE presentada a principios de año y que las conversaciones tenían como objetivo alcanzar un compromiso, dijeron.
"Estamos en una fase intensa de negociaciones en la que intentaremos fusionar los documentos de ambas partes", contó un diplomático.
Fase intensa de negociaciones
El acuerdo lleva en suspenso desde 2019 debido, en gran parte, a la preocupación europea por la deforestación de la Amazonia. Después de dos días de conversaciones, los negociadores acordaron seguir trabajando a un ritmo más rápido, dijo un funcionario brasileño.
"Nuevas rondas están programadas semanalmente, a través de videoconferencias y reuniones en persona, y luego los negociadores principales se reunirán en Brasilia el 30 de octubre para hacer un balance de los avances", dijo un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil.
La Unión Europea esperaba una respuesta del Mercosur a su propuesta de incluir compromisos de sostenibilidad y cambio climático en el acuerdo alcanzado en 2019 con el bloque sudamericano formado por Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, criticó la adenda tras reunirse en junio con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pero ambos líderes dijeron que esperaban que el acuerdo pueda cerrarse a finales de año.
Desafíos ambientales y objetivo de cierre
La deforestación de la selva amazónica ha disminuido rápidamente desde que Lula asumió el cargo en enero, según datos preliminares del Gobierno, revirtiendo el aumento de la destrucción bajo su predecesor de derecha Jair Bolsonaro.
A Brasil, actual presidente pro tempore del Mercosur, no le han gustado las salvaguardas medioambientales que la UE ha añadido en una carta adjunta.
"La adenda está llena de imposiciones, pero ni una palabra sobre el costo de preservar este activo medioambiental", dijo a Reuters el ministro de Agricultura, Carlos Favaro.
Afirmó que la UE es un mercado importante para Brasil, pero advirtió que se están abriendo otros mercados menos restrictivos en Asia y Oriente Medio.